Té blanco Liping
El té blanco Liping, un tesoro entre los tés chinos, se elabora a partir de la rara variedad “Baiye No. 1”. Originalmente cultivado en la provincia de Zhejiang durante la dinastía Ming, donde se lo conocía como “Anji Baicha”, este té se introdujo más tarde en la provincia de Guizhou. Aquí en Guizhou, el té blanco Liping se produce utilizando métodos de procesamiento tradicionales de Zhejiang, preservando su legado y resaltando las cualidades únicas del terroir local.
Aunque se lo denomina “té blanco”, el té blanco Liping se parece más al té verde en cuanto a sabor. Sin embargo, se distingue por tener un perfil mucho más suave y delicado en comparación con la mayoría de los tés verdes, y ofrece un sabor refinado y delicado que atrae tanto a los bebedores de té nuevos como a los experimentados.
Famoso por sus características únicas (“hojas blancas con venas verdes y un sabor fresco y dulce”), su distintiva coloración blanca se produce cuando las temperaturas bajan por debajo de los 25 °C, lo que lo convierte en una maravilla estacional.
Este té, que se cultiva a una altitud de entre 500 y 800 metros en el condado de Liping, Guizhou, se recolecta a mano en primavera (desde finales de marzo hasta mediados de abril), siguiendo un meticuloso método de recolección de un brote con una o dos hojas. Las hojas frescas se someten a técnicas de procesamiento tradicionales, que incluyen marchitarlas, enrollarlas y secarlas, para preservar su forma elegante y su color brillante.
El té blanco Liping se prepara en una infusión clara y brillante con un sabor suave y dulce, complementado con sutiles aromas florales y frutales. Su sabor refrescante y su regusto persistente lo convierten en una opción deliciosa para cualquier ocasión.
Rico en polifenoles, catequinas y aminoácidos, este té ofrece numerosos beneficios para la salud, como estimular el metabolismo, mejorar la digestión y aportar antioxidantes. Ideal para preparar a 90 °C, ofrece una experiencia refinada y rejuvenecedora en cada taza.